El obispo emérito de la diócesis de Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, fue localizado en un hospital de Morelos, luego de permanecer desaparecido alrededor de 40 horas, víctima de secuestro exprés y de robo.
De acuerdo con la Fiscalía de Morelos, el prelado fue privado de la libertad por varias horas, por lo que indagan el caso como secuestro exprés e investigan presunto robo de dinero de sus cuentas bancarias.
Ayer, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) informó sobre la desaparición del obispo emérito, de quien perdieron el rastro el pasado sábado 27 de abril, cerca de las 22:00 horas, luego de que se trasladara a Tixtla, Guerrero.
Las alertas de la CEM se encendieron debido a que, en febrero pasado, Rangel Mendoza medió entre grupos del crimen organizado para detener la violencia contra comercios en Chilpancingo, lo que, según sus propias palabras, le valió amenazas de muerte.
En tanto, fuentes que pidieron el anonimato confirmaron que los delincuentes vaciaron las cuentas bancarias del prelado y le robaron una camioneta, para luego liberarlo. Salvador Rangel habría acudido por su propio pie a hospitalizarse por baja presión.
Al cierre de esta edición, la Secretaría de Salud de Morelos informó que el obispo solicitó el egreso voluntario del Hospital General de Cuernavaca, Dr. José G. Parres.