Gaza ha entrado en los días mas negros, sostienen funcionarios de la Organización de Naciones Unidas (ONU), al advertir que la ayuda vital ha quedado bloqueada después de que fuerzas y tanques israelíes tomaron control del principal punto de cruce de la ayuda, en Rafah.

Civiles en la ciudad fronteriza, que alberga a más de 1.4 millones de personas, en su mayoría de familias desplazadas, equipararon el bombardeo con el infierno, en el que llueven miles de proyectiles, mientras ellas se apresuran a evacuar, siguiendo órdenes de los militares israelíes.

Pese a los ruegos de sus aliados más cercanos para detenerse, Israel llevó sus tanques hacia el este de Rafah y capturó el cruce fronterizo la mañana de ayer, en lo que llamó una operación limitada, dirigida a acabar con combatientes y desmantelar infraestructura utilizada por militantes de Hamas. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo que es un paso importante hacia el desmantelamiento de Hamas.